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Qué le Ocurre a los Niños Cuando Mueren en su Infancia?

February 12, 2009

Hace un par de días surgieron una serie de comentarios acerca de este tema, posterior a una entrada que escribí con respecto al tema de la predicación como medio decretado por Dios para llamar a Sus elegidos. Cómo así? Veanlo de esta manera: Qué le ocurre a los niños que mueren antes de tener una edad en la que puedan comprender la revelación de Dios, antes de poder comprender el mensaje del evangelio?La Biblia dice, “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;  los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios” (Juan 1: 12-13). Los hijos de Dios son aquellos que recibieron a Cristo y creen en Él, entonces, que con los infantes que no pueden recibirle a causa de su falta de entendimiento?

Además, hace unas semanas escribí una entrada acerca del aborto. Pregúntense esto: Qué le pasa a todos esos millones de bebés que son asesinados cada año? Ellos nunca tuvieron la oportunidad de escuchar el evangelio y ser regenerados. Han sido condenados al infierno? Con esta entrada no intento ser dogmático aduciendo que la Biblia habla claramente del tema, pues no es así. Es más, aparte de un versículo en la Biblia, no puedo encontrar otro del que podamos sacar conclusiones para creer una u otra cosa.

Algunos comentaristas de este blog han expresado sus opiniones, y otros sus dudas y deseos de obtener explicaciones. Creo que el fin de esta entrada es expresar y defender mis creencias al respecto. Marcelo, un comentarista y blogger apuntó a la Confesión de Fe de Westminster para hacer su punto: los bebés que son elegidos van al cielo, y los que no van al infierno. Lo primero que quiero analizar es la Confesión de Fe. En el décimo capítulo dice,

“Los niños elegidos que mueren en la infancia, son regenerados y salvados por Cristo por medio del Espíritu, quien obra cuando, donde, y como quiere. En la misma condición están todas las personas elegidas que sean incapaces de ser llamadas externamente por el ministerio de la palabra.” x.iii

En este párrafo queda claro lo que pensaron lo puritanos cuando hablaron acerca del llamamiento eficaz. Noten que creían que los infantes que morían y que eran elegidos eran regenerados y salvados por Cristo. Lo mismo, dicen ellos, todos aquellos que son incapaces de ser llamados externamente, por ejemplo los que sufren de algún tipo de retraso mental que les imposibilita escuchar y responder al evangelio. Pero luego la confesión dice en el siguiente punto,

Los otros no elegidos aunque sean llamados por el ministerio de la palabra y tengan algunas de las operaciones comunes del Espíritu, sin embargo nunca vienen verdaderamente a Cristo, y por lo tanto no pueden ser salvos; Mucho menos pueden los hombres que no profesan la religión cristiana, ser salvos de otra manera, aún cuando sean diligentes en ajustar sus vidas a la luz de la naturaleza y a la ley de la religión que profesan; y el afirmar y sostener que lo pueden lograr así, es muy pernicioso y detestable.” x.iv

Quiero que pongan atención a las palabras en itálica. Este párrafo infiere que estos no elegidos pueden entender el evangelio, inclusive tienen algunas de las operaciones del Espíritu, pero al no ser elegidos, no pueden venir a Cristo, y por ello no son salvos. Qué quisieron decir entonces los puritanos en estos párrafos? Que los infantes y personas con incapacidades mentales, quienes son incapaces de comprender la revelación general de Dios, y el evangelio, son parte de los elegidos. Esto es lo que ha sido interpretado por los calvinistas a lo largo de la historia. Por ejemplo, el Center for Reformed Theology and Apologetics (Centro para Teología y Apologética Reformada) dice en su Exposición acerca de este párrafo de la Confesión, lo siguiente,

“El Espíritu Santo usualmente trabaja por medios; y la Palabra, leída o predicada, es el medio ordinario que Él considera eficaz para la salvación de pecadores. Pero Él tiene acceso inmediato a los corazones de hombres, y puede producir un cambio salvífico en ellos sin el uso de medios ordinarios. “Ya que los infantes son sujetos no aptos para instrucción, su regeneración debe ser efectuada sin medios, por la agencia inmediata del Espíritu Santo en sus almas. Hay personas adultas, yambién, a los cuales el uso de la razón ha sido denegado. Sería duro y no merecido suponer que ellos, por esto, sean excluídos de la salvación; y a tantos de ellos como los que Dios ha escogido, puede aplicarse de la misma manera que a los infantes.”

A lo que voy es que los calvinistas han creído que este tipo de personas, ya sean infantes o personas con retraso mental, son parte de los elegidos de Dios. Charles Spurgeon, en su semón “Infant Salvation” (Salvación de Infantes) dijo lo siguiente,

Ahora, permitan que cada madre y padre aquí presentes sepan con seguridad que su hijo está bien, si Dios se lo ha llevado en sus días de infancia. Nunca escucharon su declaración de fe – no era capaz de hacer tal cosa; no fue bautizado en el Señor Jesucristo, ni enterrado con Él en el bautismo; no era capaz de dar tal “respuesta de buena conciencia hacia Dios,” sin embargo, usted puede descansar seguro que el niño está bien, bien en un alto y mejor sentido que el de ustedes; bien sin limitación, bien sin excepción, bien infinitamente, “bien” eternamente. Quizás usted diga, “Qué razones tenemos para creer que el niño está bien?” Antes de entrar en ese asunto haré una observación. Ha sido perversamente, mentirosamente, y calumniosamente dicho del Calvinismo, que creemos que algunos niños perecen. Aquellos que hacen tal acusación saben que su carga es falsa. No puedo ni atreverme a esperar, a pesar de querer hacerlo, que ignorantemente nos tergiversan. Ellos malvadamente repiten lo que ha sido negado miles de veces, lo que ellos saben no es cierto. En el consejo de Calvino a Knox, él interpreta el segundo mandamiento, “mostrando misericordia a miles de ellos que me aman,” refiriéndose a generaciones, y por tanto parece enseñar que los infantes que han tenido ancestros piadosos, sin importar que tan remotos, que mueren en su infancia son salvos. Esto podría captar a toda la raza. Pero los Calvinistas modernos, no conozco excepción, pero esperamos y creemos que todas las personas que mueren en su infancia son elegidos. El Dr. Gill ha sido visto en estos tiempos como el estandard del Calvinismo, sin decir del ultra-calvinismo, él mismo nunca da a entender la suposición que ningún infante pereció, sino afirma de ello un tema oscuro y misterioso, pero esa es su creencia, y piensa que tiene a la Escritura para garantizarlo, que aquellos que han muerto en la infancia no han perecido, pero que han sido numerados con los elegidos de Dios, y han entrado en el reposo eterno. Nunca hemos enseñado el contrario, y cuando la acusación es traída, la repudio y digo, “Ustede lo podrán haber dicho, nunca nosotros, y ustedes saben que nunca lo hicimos. Si se atreven a repetir la mentira de nuevo, dejen la mentira permanecer en escarlata en su mejilla si usted es capaz de sonrojarse.” Nunca hemos soñado tal cosa. Con muy pocas o escasa excepciones, tan raras que nunca las he escuchado excepto de los labio sde los difamadores, nunca hemos imaginado que los infantes que mueren han perecido, sino hemos creído que entran en el paraíso de Dios.”

Spurgeon resume lo que ha sido la creencia de los calvinistas, que los infantes que mueren forman parte de los elegidos de Dios. Repito, esto no es una doctrina esencial del cristianismo, pero creo que puede ser apoyada por el único pasaje que habla del tema en la Biblia. Pero, antes de hablar de este versículo, quiero defender el punto que comparto con el Príncipe de los predicadores.

Romanos 5: 12-14: Adán y Cristo

La Biblia deja claro que todos los hombres son pecadores desde su concepción (Salmo 51: 5; 58: 3). Pero el apóstol Pablo nos describe porque eso fue así. En Romanos 5, Pablo describe lo que hizo Dios en la eternidad. Estableció dos cabezas federales o representativas de toda la humanidad; una, Adán, en quien están representados toda su descendencia, es decir toda la raza humana; y Cristo, en quien están representados todos los que han de ser llamados hijos de Dios. Por ello Pablo dice,

12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.  13 Pues antes de la ley, había pecado en el mundo; pero donde no hay ley, no se inculpa de pecado. 14 No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aún en los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adán, el cual es figura del que había de venir.”

Es decir, al estar toda la raza humana representada en Adán, debido a su pecado, todos los hombres pecaron en Adán. Esto es lo que conocemos comno el pecado original, del cual es culpable cada hombre que ha sido concebido en la historia del universo. Pablo demuestra que esto es un hecho, ilustrando la muerte de aquellos que no pecaron de la manera en la que lo hizo Adán. Qué hizo Adán? Desobedecer la Ley de Dios. Dios había dicho, “del árbol de la ciencia del bien y el mal no comerás,” y el primer hombre desobedeció. Entonces, Pablo quiere que veamos que la doctrina del pecado original es verdadera, ya que aún los niños mueren. Aquellas personas que sin poder entender la ley de Dios, mueren igual que aquellos que comprenden la ley de Dios y la desobedecen. La muerte es un enemigo. Nunca fue parte de la creación, sino que es la consecuencia del pecado. Los niños mueren, sin haber desobedecido a la ley de Dios de la manera en la que lo hizo Adán y lo hacen el resto de hombres, a causa de ese pecado original.

Pablo escribe a los Corintios, “en Adán todos mueren.” Esa es la consecuencia del pecado original, pero sin embargo, a pesar de que los hombres son culpables y deben ser condenados por el simple hecho de ser culpables del pecado de Adán, los hombres también pecan en sus obras. Es decir, no sólo yo era culpable del pecado original, sino que mi vida pecaminosa me condenaba cada vez más. Porqué? Porque yo hacía malas obras.

Romanos 1: 18-32: La Culpabilidad del Hombre

Ahora, el apostol Pablo dice que los hombres no tienen excusa en el día de su condenación, ya que Dios se les había hecho claramente manifiesto en la creación. La humanidad no puede decirle a Dios, “Disculpa por no creer en ti, pero es que nunca llegó alguien a predicarme el evangelio y a hablarme de Cristo.” Todos podían ver el poder y la deidad de Dios en Su creación y por ello debían glorificarle, pero decidieron cambiar la gloria de Dios por la de la criatura.

Pero vean lo que escribe Pablo,

18 Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad;  19 porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó. 20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa. 21 Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. 22 Profesando ser sabios, se hicieron necios23 y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles. 24 Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos,  25 ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén.  26 Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, 27 y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío. 28 Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen; 29 estando atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades; 30 murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres,  31 necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia; 32 quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican.”

Vean que Pablo claramente establece que estos hombres entendían lo que Dios les había manifestado, pero se hicieron necios. Esto hombres entendieron el juicio de Dios por la desobediencia (v. 32) y aún así decidieron pecar. Por ello Dios los entregó a una mente reprobada (v. 28).

Entonces, qué pasa con los niños que mueren en su infancia?

En realidad la Biblia no habla acerca de la eternidad de los niños que mueren en su infancia, excepto por un pasaje. Es por ello que como cristianos no debemos dividirnos por una doctrina que no es esencial para el cristianismo, ya que Dios no habló mucho acerca del tema. Quizás muchos saben a que pasaje me estoy refiriendo, pero para los que no lo saben, voy a proveer el contexto y luego a citar el versículo.

David, viene ganando batallas en favor de Israel, viene extendiendo sus dominios y su fama en las naciones vecinas. Esto es lo que vemos en 2 Samuel 8-11. David, creyéndose invencible, vivía una vida de placer. En 2 Samuel 12, vemos a un rey que no acompañó a su ejército a la batalla, sino que se quedó en su palacio disfrutando de su vida. Fue en esos tiempos de ocio cuando fue tentado por su carne a tomar a una mujer que le pertenecía a otro. David, aprovechando que ese hombre, llamado Urías, era un soldado, decidió tomarla a escodidas. La llevó a la cama y tuvo relaciones sexuales con ella.

De ese pecado fue concebido un niño. Al escuchar David lo que había ocurrido, intentó ocultar su pecado matando a Urías. Claro que no lo mató personalmente, sino que lo hizo enviándolo al frente de la batalla para que muriera a manos de sus enemigos. Por supuesto que David olvidó que Dios es omnisciente, y que nada estpa encubierto de Sus ojos. Dios, envía a Natán para recordarle que Dios sabía de su pecado. Dios le dice a David,

11 He aquí yo haré levantar el mal sobre ti de tu misma casa, y tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las daré a tu prójimo, el cual yacerá con tus mujeres a la vista del sol. 12 Porque tú lo hiciste en secreto; mas yo haré esto delante de todo Israel y a pleno sol.  13 Entonces dijo David a Natán: Pequé contra Jehová. Y Natán dijo a David: También Jehová ha remitido tu pecado; no morirás 14 Mas por cuanto con este asunto hiciste blasfemar a los enemigos de Jehová, el hijo que te ha nacido ciertamente morirá.” 2 Samuel 12: 11-14

Dios haría que el niño de David muriera. Con qué propósito? Dios había dicho que los hijos no sufrirían el castigo por los pecados de sus padres. Entonces, porqué moriría este niño? El niño no estaba siendo castigado. Pero tampoco David. Cómo sé esto? Veamos que Dios le dice a David que Él había remitido sus pecados. Dios no estaba castigando a David, sino que cuando la muerte del niño se diera, David sabría que Dios verdaderamente había hablado y verdaderamente había borrado sus pecados. David tendría plena seguridad que sería salvo por su fe.

Pero, qué ocurre después? Bueno, Dios enferma al niño de David. David ayuna por siete días, lo cual es un símbolo de su arrepentimiento por haber pecado contra Jehová. Al final, después de siete días, pidiéndole a Dios por su hijo, este muere. Los ancianos que estaban con él se atemorizan conociendo lo que había pasado David en esos días pasados. Pero vemos algo extraordinario. David sabiendo de la muerte de su hijo se levanta y come, y dice estas palabras,

22 Viviendo aún el niño, yo ayunaba y lloraba, diciendo: ¿Quién sabe si Dios tendrá compasión de mí, y vivirá el niño? 23 Mas ahora que ha muerto, ¿para qué he de ayunar? ¿Podré yo hacerle volver? Yo voy a él, mas él no volverá a mí.” 2 Samuel 12: 22-23

David claramente establece que este niño está en el cielo. Muchos han querido interpretar este pasaje como que David sabe que acompañará a su hijo en la tumba, pero el contexto del pasaje nos deja claro que David está seguro que a pesar de su grave pecado contra Dios, él iría al cielo. Y esto es lo que dice en el  verso 23. No tiene de que preocuparse, pues sabe que cuando muera será salvo e  irá al cielo donde está su hijo.

Este es el único pasaje que encontramos en la Biblia con respecto al tema de la eternidad de aquellos que mueren en su infancia, y lo que nos dice es que estas personas, que son culpables por el pecado original, pero que son incapaces de responder al evangelio, y entender la ley de Dios, son salvos. Cómo? Son salvos por gracia, como el restro de los elegidos. Cristo murió por los pecados de todos nosotros, no sólo por nuestros propios pecados, sino por el pecado de Adán que hemos heredado. Entonces, estos niños que no han desobedecido de la manera en la que lo hizo Adán, son igualmente salvos, pues Cristo murió por el pecado de Adán del que son culpables.

Es por estas razones por las que creo que todos los infantes que mueren en una edad en la que no pueden entender la ley de Dios para responder a ella, pero que son culpables del pecado original, son parte de los elegidos de Dios, y por lo tanto salvos de Su ira. Finalizo con una cita de Loraine Boettner de su libro “The Reformed Doctrine of Predestination“,

“La mayoría de teólogos calvinistas han mantenido que aquellos que mueren en su infancia son salvos. LÑas Escrituras enseñan claramente que los niños de los creyentes son salvosñ pero es silente con respecto a los de los paganos. La Confesión de Westminster no pasa juicio sobre los hijos de los paganos que mueren antes de su edad de poder ser responsables. Donde las Escrituras son silentes, la confesión también, presefva silencio. Nuestros asombrosos teólogos, sin embargo, sabiendo el hecho de las tiernas misericordias de Dios sobre todas sus obras, y dependiendo de Su misericordia ampliada tanto como es posible, han mantenido una esperanza que desde que los infantes nunca cometieron ningún pecado por ellos mismos, si pecado heredado sería perdonado y ellos serían salvos sólo por principios evangélicos.

Tal, por ejemplo, fue la posición mantenida por Charles Hodge, W. G. T. Shedd, y B.B. Warfield. Concerniente a aquellos que mueren en su infancia, el Dr. Warfield dice: “Su destino es determinado irrespectivamente de su escogencia, por un decreto incondicional de Dios, suspendido para su ejecución en ningún acto suyo; y su salvación se da por la aplicación incondicional de la gracia de Cristo a sus almas, a través de la inmediata e irresistible operación del Espíritu Santo previo y aparte de cualquier acción de sus propias voluntades…Y si la muerte en la infancia depende de la providencia de Dios, es seguro Dios en su providencia quien selecciona esta vasta multitud a ser partícipes de Su incondicional salvación…Esto es para decir que ellos son incondicionalmente predestinados a la salvación desde la fundación del mundo.”

Espero leer sus comentarios al respecto. Bendiciones!

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15 Comments leave one →
  1. Ricardobeta permalink
    February 12, 2009 4:56 pm

    Eduardo:

    Muchas gracias por esta entrada. El Señor me ha permitido entender la mecánica del asunto, y ahora puedo aceptar con libertad y esperanza que los niños son salvos, junto con aquellos que están incapacitados para razonar.

    Había pasado por alto que el Señor es Todopoderoso aún para regenerar directamente al ser humano, ya que tiene libre acceso al corazón del hombre.

    También había obviado la extrema misericordia del Señor, y su naturaleza bondadosa.

    Si bien tanto los niños como las personas incapacitadas mentalmente merecen la muerte tanto como todos los demás, es de notar el hecho de que son salvadas por la gracia de Dios, ya que El es una persona tardía para la ira pero veloz para hacer misericordia a millones de millones…

    Bendiciones…

  2. March 8, 2009 9:47 pm

    El aborto durante la gestación es matar a un ser humano antes de nacer.
    No existe ningún otro ser vivo en el planeta que sea capaz de cometer semejante crimen, solo algunos seres humanos son capaces.
    Desde los distintos Gobiernos se fomenta este terrible destino para los pequeñines que van a nacer.
    Obama, Zapatero, etc. son personajes abortistas.
    A los distintos poderes políticos les sale rentable económicamente, cobran impuestos por cada aborto, en lugar de enseñar a la población a prevenir embarazos no deseados prefieren que las madres maten a sus propios hijos.
    Herodes, hace más de 2.000 años mandó matar a centenares de niños para evitar que el Mesías naciese.
    Actualmente incitan y promueven que sean los propios padres quienes maten a sus hijos.

  3. Karina permalink
    June 29, 2009 10:50 pm

    He leido todo el articulo sobre la muerte de los niños, y yo antes habia tratado este tema con mi pastor en la iglesia, cuando el mismo, nos lanzo la pregunta de: ¿Todos los niños que mueren van al cielo?, entre los hermanos hubieran respuestas positivas sin embargo un grupo mas de hermanos se levanto comentando que solo los niños que hubieran nacido del pacto iban a ir al cielo, ¿quienes son estos niños nacidos del pacto???
    (¿Se refiere a los niños con padres cristianos?)

    • June 30, 2009 1:30 am

      Karina,

      Todo el que entre en el reino de Dios debe nacer de nuevo, por lo tanto como dice Juan 1:13, no importa la descendencia, ni si los padres son creyentes, sino de si Dios le ha escogido para ser vsalvos. Lo que mantenemos es que aquellos que no tienen la capacidad intelectual para responder al evangelio, son salvos por gracia.

  4. August 19, 2011 10:30 pm

    Quizá así como Dios en su soberanía nos puso en el lugar y la hora destinada para que oyéramos el evangelio, y el Santo Espíritu obró a su hora elegida en nosotros, así Dios en su soberanía salva a estos seres humanos al llevárselos antes de tener uso de razón.

    Todos los niños que mueren son elegidos por Dios en su decreto soberano.

    Soli Deo gloria! :-)

  5. Virginia permalink
    June 9, 2012 2:46 am

    Y mi pregunta es ¿y hasta que edad porque nos niños desde pequeñitos pecan tambièn. No seràn muy conscientes de su pecado pero se hace evidente su naturaleza pecaminosa.?

  6. armando esquivel gatjens permalink
    July 29, 2013 3:30 am

    Armando
    28,julio,2013
    Lo que dijo David,Yo voy a él,mas él no volverá a mí,significa que él igual que él niño va a morir.y si usted cree que él niño esta en el cielo con David eso no es bíblico porque en Hch 2,34,dice que David no subío a los cielos .En Jn3,13 Jesucristo dice,nadie subío al cielo,sino el que descendío del cielo.
    En Ec 3,21 dice ¿Quién sabe que el espíritu de los hijos de los hombres sube arriba,y el espíritu de los animales desciende abajo a la tierra?
    No se preocupe,que va hacer Dios con los niños,preocupece por que su nombre este escrito en el libro de la vida

  7. Gabriel Moreira permalink
    September 2, 2013 10:32 pm

    Armando:
    Hechos 2:34 no contradice la interpretación reformada de lo que dijo David con respecto al niño: “Yo voy a él,mas él no volverá a mí”.
    Ademas tienes que entender que el cielo, el reino de los cielos NO ES lo mismo que el “paraíso”, son dos lugares distintos, te vendría una mejor lectura de la parábola del rico y Lázaro.
    Eso sin contar el fuerte tinte arminiano de tu comentario, la preocupación nuestra no es si nuestro nombre está escrito en el Libro de la Vida, sino de que si verdaderamente estamos en la fe. Nuestra preocupación no es que si nuestro nombre “se borra” del libro de la vida (algo que jamás pasa con un escogido), sino de que si Cristo está realmente en nosotros y es “capaz para guardar nuestro depósito para aquel día” (2 Timoteo 1:12).

    Quienes no están escritos en el libro de la vida del Cordero DESDE EL PRINCIPIO DEL MUNDO, no son escogidos, pero estos son los que adoran a la Bestia y a su imagen,

    Y la adorarán todos los que moran en la tierra, cuyos nombres no han sido escritos, desde la fundación del mundo, en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado. – Apocalipsis 13:8 LBLA.

    Buen aporte pastor Eduardo, ¡excelente!
    Soli Deo Gloria

  8. marco permalink
    December 1, 2014 4:34 pm

    Estimados

    lo unico que me hace ruido en este asunto, sobre la postura clasica calvinista en este tema es que por lo que aqui se explica podriamos asumir que cuando uno nace, lo hace siendo salvo. pero como es posible que miremos la salvación como un interruptor que al pasar de cierta edad el interruptor cambia y pasemos de salvos a no salvos para posteriormente.

    espero sus comentarios

    saludos.

    • March 9, 2015 7:16 pm

      Soberania Marco… al entender la soberania en donde la providencia de Dios en su voluntad permisiva “permite” el pecado podemos entender el que El mismo “permite” la muerte de los niños y que El los considera como suyos, desde antes de la fundacion del mundo… para entender esto tiene que ser visto desde el decreto de Dios, el es soberano para salvar por “Gracia”, sin pasar por alto su justicia.

    • sara permalink
      September 11, 2015 12:41 pm

      Yo creo q los niños de padres malvado o de brujos o de asesino o violadores o de impios o ateos dificil ir al cielo.

      • Francisco permalink
        November 21, 2015 3:17 pm

        Cada uno cargará con su pecado …..

  9. CANDIDO GARCIA RODRIGUEZ permalink
    March 3, 2019 5:38 pm

    En Ap. 20:11-15, dice: “Vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él de delante del cual huyeron la tierra y el cielo y ningún lugar se halló ya para ellos. Y vi los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios. Los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida. Y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras…. El que no se halló inscrito en el libro de la vida, fue lanzado al lago de fuego”.

    “Los muertos”, expresión para referirse a los que no tienen “la vida” de Dios.
    “Grandes y pequeños”, puede referirse a poderosos, encumbrados, ricos, etc. y gente común, “humildes”, que no sobresalen, pero ¿no puede referirse también a adultos y niños?
    “los libros (con cosas escritas, según las obras de los “muertos”)…y otro libro, el cual es el libro de la vida (que sólo contiene nombres de personas)”, ¿por qué es necesario un libro que no contiene obras, pero sí nombres?

    Mi opinión es que todos los que no pudieron hacer obras (“responsables” al ojo humano): bebés dentro y fuera del vientre de la madre, infantes, niños sin llegar a la edad “del discernimiento”, así como enfermos mentales y discapacitados (como el paralítico de Mt. 9; Mr.2 y Lc. 5, que a pesar de ser tetrapléjico, tenía pecados) no podrán ser juzgados por “sus obras”. Para ello será consultado el “libro de la vida”. Y allí dice lo que ocurrirá.

    Dios no es “sólo amor” (1 Jn. 4: 8, 16) sino que “antes” de eso “es luz” (1 Jn. 1:5). Y dice que “no dará, en ningún modo, por inocente al culpable” (Nm. 14:18; Nah. 1:3), ¿qué sentido tendría esta expresión si Dios salvara “automáticamente” a algunos pecadores, sin haber sido elegidos, sólo por el hecho de “ser pequeños” o “porque no tenían bien su mente” cuando murieron?

    Dios discrimina, y elige a algunos para salvación; a otros, no los elige (Ro. 9: 13,15, 22). No está obligado a tener misericordia de todo el mundo. Su amor (para salvación) es un amor elector (Ro. 8: 29-30). Su cuidado sabio y amoroso es para con todos en Su providencia (aún para con los animales, Sal.104:28; 145:16), pero no en Su amor –para salvación- en Cristo (Mt. 5:45). Su gracia no es indiscriminada, sino que sólo la derrama en “los vasos de misericordia”, preparados de antemano para esto (Ro. 9:23).

    Dios no predestina a nadie a la condenación, pero sí a la salvación (Ro. 8:30; 1 Co. 2:7; Ef. 1:5). Sólo aquellos que el Padre entregó al Hijo en la eternidad pasada, son Suyos. Por éstos el Hijo ruega, y no por el mundo (Jn. 17: entero, especialmente v. 9). Y a éstos dio Su gracia en Cristo, ya antes de la fundación del mundo, pero no a los demás (2 Ti. 1:9).

  10. Cándido García permalink
    March 16, 2019 10:57 am

    En Ap. 20:11-15, dice: “Vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él de delante del cual huyeron la tierra y el cielo y ningún lugar se halló ya para ellos. Y vi los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios. Los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida.Y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras…. El que no se halló inscrito en el libro de la vida, fue lanzado al lago de fuego”.
    “Los muertos”, expresión para referirse a los que no tienen “la vida” de Dios.
    “grandes y pequeños”, puede referirse a poderosos, encumbrados, ricos, etc. y gente común, “humildes”, que no sobresalen, pero ¿no puede referirse también a adultos y niños?
    “los libros (con cosas escritas, según las obras de los “muertos”)…y otro libro, el cual es el libro de la vida (que sólo contiene nombres de personas)”, ¿por qué es necesario un libro que no contiene obras, pero sí nombres?

    Mi opinión es que todos los que no pudieron hacer obras (“visibles” para los hombres): bebés dentro y fuera del vientre de la madre, infantes, niños sin llegar a la edad “del discernimiento”, así como enfermos mentales y discapacitados (como el paralítico de Mt. 9; Mr.2 y Lc. 5, que a pesar de ser tetraplégico, tenía pecados) no podrán ser juzgados por “sus obras”. Para ello será consultado el “libro de la vida”. Y allí dice lo que ocurrirá.
    Dios no es “sólo amor” (1 Jn. 4: 8, 16) sino que “antes” de eso “es luz” (1 Jn. 1:5). Y dice que “no dará, en ningún modo, por inocente al culpable” (Nm. 14:18; Nah. 1:3), ¿qué sentido tendría esta expresión si Dios salvara “automáticamente” a algunos pecadores, sin haber sido elegidos, sólo por el hecho de “ser pequeños” o “porque no tenían bien su mente” cuando murieron?

    Dios es selectivo, y elige a algunos para salvación; a otros, no los elige (Ro. 9: 13,15, 22). No está obligado a tener misericordia de todo el mundo. Su amor (para salvación) es un amor elector (Ro. 8: Su cuidado sabio y amoroso es para con todos en Su providencia (aún para con los animales, Sal. 104:28; 145:16), pero no en Su amor en Cristo (Mt. 5:45). Su gracia no es indiscriminada, sino que sólo la derrama en “los vasos de misericordia”, preparados de antemano para esto (Ro. 9:23).
    Dios no predestina a nadie a la condenación, pero sí a la salvación (Ro. 8:23; 1 Co. 2:7; Ef. 1:5).Sólo aquellos que el Padre entregó al Hijo en la eternidad pasada, son Suyos. Por éstos el Hijo ruega, y no por el mundo (Jn. 17:entero, especialmente v. 9) . Y a éstos dio Su gracia en Cristo, ya antes de la fundación del mundo, pero no a los demás (2 Ti. 1:9).

  11. CANDIDO GARCIA RODRIGUEZ permalink
    March 25, 2019 7:34 pm

    En Ap. 20:11-15, dice: “Vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él de delante del cual huyeron la tierra y el cielo y ningún lugar se halló ya para ellos. Y vi los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios. Los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida.Y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras…. El que no se halló inscrito en el libro de la vida, fue lanzado al lago de fuego”.
    “Los muertos”, expresión para referirse a los que no tienen “la vida” de Dios.
    “grandes y pequeños”, puede referirse a poderosos, encumbrados, ricos, etc. y gente común, “humildes”, que no sobresalen, pero ¿no puede referirse también a adultos y niños?
    “los libros (con cosas escritas, según las obras de los “muertos”)…y otro libro, el cual es el libro de la vida (que sólo contiene nombres de personas)”, ¿por qué es necesario un libro que no contiene obras, pero sí nombres?

    Mi opinión es que todos los que no pudieron hacer obras (“visibles” para los hombres): bebés dentro y fuera del vientre de la madre, infantes, niños sin llegar a la edad “del discernimiento”, así como enfermos mentales y discapacitados (como el paralítico de Mt. 9; Mr.2 y Lc. 5, que a pesar de ser tetraplégico, tenía pecados) no podrán ser juzgados por “sus obras”. Para ello será consultado el “libro de la vida”. Y allí dice lo que ocurrirá.
    Dios no es “sólo amor” (1 Jn. 4: 8, 16) sino que “antes” de eso “es luz” (1 Jn. 1:5). Y dice que “no dará, en ningún modo, por inocente al culpable” (Nm. 14:18; Nah. 1:3), ¿qué sentido tendría esta expresión si Dios salvara “automáticamente” a algunos pecadores, sin haber sido elegidos, sólo por el hecho de “ser pequeños” o “porque no tenían bien su mente” cuando murieron?

    Dios es selectivo, y elige a algunos para salvación; a otros, no los elige (Ro. 9: 13,15, 22). No está obligado a tener misericordia de todo el mundo. Su amor (para salvación) es un amor elector (Ro. 8: Su cuidado sabio y amoroso es para con todos en Su providencia (aún para con los animales, Sal. 104:28; 145:16), pero no en Su amor en Cristo (Mt. 5:45). Su gracia no es indiscriminada, sino que sólo la derrama en “los vasos de misericordia”, preparados de antemano para esto (Ro. 9:23).
    Dios no predestina a nadie a la condenación, pero sí a la salvación (Ro. 8:23; 1 Co. 2:7; Ef. 1:5).Sólo aquellos que el Padre entregó al Hijo en la eternidad pasada, son Suyos. Por éstos el Hijo ruega, y no por el mundo (Jn. 17:entero, especialmente v. 9) . Y a éstos dio Su gracia en Cristo, ya antes de la fundación del mundo, pero no a los demás (2 Ti. 1:9).

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