La verdadera vírgen María

Quién fue María? En realidad la Biblia nos habla poco acerca de ésta excepcional mujer. Empezamos a saber de ella cuando es una adolescente y estaba prometida para casamiento con José, ambos descendientes del rey David, José partiendo de Salomón y María de Natán, ambos hijos de David.Pero muchos errores ha cometido la humanidad con respecto a María, ya que unas religiones como el islam la han declarado ser la reencarnación de María, la hermana de Moisés y Aarón, y otras, como el Catolicismo, que la han hecho objeto de adoración, y aún otras, que han blasfemado aún más, como los mormones, que declaran que Dios tuvo relaciones sexuales con ella y ahí fue concebido Jesús.

Pero, cómo han surgido estos errores? Si han estado leyendo las entradas previas, se podrán imaginar, que esto se debe a la falta de obediencia de los hombres de leer la Biblia, y así se han expuesto a que hombres faltos de entendimiento (como los llama Jesús), alteren la palabra de Dios para engañar, y con ello llevar a la perdición a la humanidad. Justo ésto es lo que desea Satanás.

Pero debemos dar gracias a Dios porque ha hecho perdurar aún en nuestros días Su palabra, y podemos aprender lo que Él realmente nos quiso enseñar. Y en esta entrada vamos a analizar principalmente la visión más peligrosa de la vírgen María.

El Catolicismo enseña acerca de la Inmaculada Concepción. Esto no se trata de la concepción de Jesús, sino de la concepción de María. Cómo así? Pues según el papa Pío IX, en 1854, haciendo uso de la facultad que le fue otorgada por otros hombres (Infalibilidad papal) dice que María fue concebida por sus padres de la forma natural, pero que Dios excluyó el pecado original de su alma, ésto pues era la nueva Eva, madre del nuevo Adán. Por ello Dios, en su sabiduría y Cristo en su misericordia, removieron el pecado original de ella (Leer Enciclopedia Católica).

Cuando leemos la Enciclopedia Católica, vemos que ésta descripción se basa en lo que han dicho hombres que pertenecían al catolicismo, como San Basilio, San Crisóstomo, Tertuliano, Cirilo, Hipólito, y aproximadamente quince otros hombres. Pero, es ésto lo que dice la Biblia? La respuesta es un rotundo NO. Claro que no es de extrañarse, ya que el mismo Vaticano ha dicho que la Biblia no es completamente cierta (leer entrada anterior).

La Biblia, que es la palabra de Dios, nos enseña a otra María. Claro, nadie puede negar, que era una mujer con mucha sabiduría, o sea, con un gran temor de Dios (Proverbios 1). Fue por eso que fue hallada con gracia ante los ojos de Dios, y fue por ello que fue la escogida para actuar como el vehículo, a través del cual, Cristo vendría a la tierra.

Si vemos en Mateo 1 y Lucas 1 y 2, podemos leer que María fue hallada favorecida ante los ojos de Dios, y fue bendecida para traer al mundo al Salvador, a través del Espíritu Santo. Pero leemos porque razón María fue escogida. Ella siempre fue humilde de corazón, y se apegaba a los mandamientos de Dios. Ella misma le da gracias a Dios, pues miró la bajeza de ella y la bendijo. En ningún lugar de la Biblia habla acerca de la concepción de María. Porqué no? Pues no tiene importancia, ya que fue igual que el nacimiento del resto de la humanidad. No me refiero al sentido fisiológico, pero al sentido espiritual; era una pecadora. María se sintió bendecida pues vio en persona la misericordia de Dios para con ella, y el resto de su pueblo. En el cánto de María (Lucas 1: 46-56), ella da gracias a Dios porque fue hecha salva, al saber que el Hijo de Dios, su Redentor, estaba por llegar. María dice,

“Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador. Porque ha mirado la bajeza de su sierva; Pues he aquí, desde ahora me dirán bienaventurada todas las generaciones.” Lucas 1: 47-48
Si María hubiera sido concebida sin pecado, como lo quiere decir la Iglesia Católica Romana, no hubiera necesitado a un salvador. Cristo vino a rescatar a los pecadores de la ira de Dios. Dios declara a todos los hombres, desde Adán, como pecadores. Dios los declara como sus enemigos (Romanos 5:10). Todos somos hijos de ira (Efesios 2: 1-3). Estamos destituídos de la gracia de Dios (Romanos 3:23). En esa declaración también se encuentra María, quien claramente dijo que necesitaba un Salvador.
La única persona que no tuvo, ni tendrá pecado, es Jesús. Eso es lo que dice la Biblia. La palabra de Dios NO enseña que María y Jesús eran los únicos sin pecado original. Cristo, el salvador de la humanidad, fue el único que nació sin pecado original, pues fue concebido por el Espíritu Santo, dejando por fuera el acto natural entre un hombre y una mujer, del cual, todo ser humano nace con pecado.

“He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre.” Salmos 51: 5

Todos los seres humanos que hemos andado por la tierra somos pecadores. Sino leamos lo que nos dice el Espíritu de Dios en Romanos 3: 21-24:

“Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas; la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús” Romanos 3: 21-24

Dios nos dice en ese pasaje que TODOS hemos pecado, y no hay nadie que no requiere de Cristo para ser salvo, inclusive María. Muchos podrán pensar que quiero degradar el nombre de ésta mujer, pero por el contrario, lo que deseo es dejar claro lo que dice la Biblia. Desearía yo ser tan fuerte en espíritu como María. Desearía yo que Dios me hubiera hablado de la fomra que le habló a María. Pero no debemos negar que fue una mujer excepcional, pero nació, vivió y murió como cualquier ser humano, teniendo la bendición de ser la mujer que dio a luz a Cristo.Ahora, con el engaño de la Inmaculada Concepción, los líderes del catolicismo, han demostrado que nunca han tomado en serio la veracidad de la Biblia, ni lo que Dios nos ha impuesto. En Éxodo 20, leemos claramente que Dios le deja ver a su pueblo, que NO debe adorar nada que esté en los cielos o en la tierra, refiriéndose a ángeles, hombres, santos, estrellas, planetas, animales, etc. Dios nos prohibe adorar cualquier cosa que no sea Él, pues Jehová es el único y todopoderoso Dios.

Quienes somos nosotros para contradecir a Dios, haciéndonos creer que podemos venerar a hombres ó mujeres que ya fallecieron? Más claro de lo que dice Dios en la Biblia no se puede tener. Debemos imitar a María en su fé, en su fortaleza espiritual, en su obediencia a Dios, pero más de eso es pecado. Y si no, que fue lo que hizo Dios con aquellos que adoraban a otros dioses? Los castigaba y los sacaba de la tierra prometida.

Veamos el pasaje de Mateo 12: 46-50. Uno de los apóstoles le dice a Jesús que afuera del aposento donde se encontraba Él enseñando, se encontraba María y los hermanos de Jesús (hijos de María), y Jesús le deja en claro que Él no tiene madre, y que no sólo ellos son sus hermanos. Deja en claro, que aquel que cree en Él y sigue la voluntad de Dios, ese es considerado su familia.

Lo que nos deja en claro este pasaje es que Jesús no tiene madre, pues Dios no tiene madre. Dios es: “el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último” Apocalipsis 22: 13. Jesús ES Dios y siempre ha existido, por lo tanto NO tiene madre, ni necesita de un ser humano para existir. O puede creer alguno de nosotros que Jesús necesitaba de una mujer para venir al mundo? Lo hizo así para poder enseñarnos; para poder convertirse en el cordero para expiación de nuestros pecados; para sacrificarse por nosotros.

El discurso del papa Pío IX explica algunos pasajes de la Biblia, los cuales nosotros vamos a leer. El pasaje de Génesis 3:15, este hombre dijo que Dios le dio gracia a la mujer (María), debido a lo que la serpiente había hecho con el hombre. Pero en realidad lo que dice el pasaje es que la semilla de la mujer, quién es Jesús, herirá a la serpiente. Cómo sabemos que Jesús es la semilla? Vemos que el linaje de cualquier persona es dado de parte del padre, pero aquí no se menciona a ningún hombre, más bien se menciona de un hombre que nace de una mujer sin necesidad de un hombre, y éste es Jesús. Cómo hirió Jesús a la serpiente (Satanás)? Muriendo en la cruz puro, SIN pecado, pues fue así como llevó nuestros pecados. Este pasaje NO trata sobre María, trata sobre Jesús.

Después Pío IX discute que en el capítulo 8 del libro de Proverbios, Dios habla de María, representándola como la sabiduría de Dios. Qué blasfemia es ésta? Con que valor pueden entonces enseñar de la Biblia, si estos hombres la han profanado? Basta leer la introducción de ese mismo libro (Proverbios 1) donde nos define que es la sabiduría:

“El principio de la sabiduría es el temor de Jehová” Proverbios 1: 7

Todo el libro de Proverbios y Eclesiástes habla de la sabiduría de Dios, la cual se basa en tener temor de Dios, pues sólo aquellos que temen a Dios, pueden seguir su camino. Y no quiero decir que Dios nos debe dar temor, sino más bien, que nos debe dar temor NO obedecerle. Veamos que nos dice Jesús:

“Mas os digo, amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a éste temed” Lucas 12: 4-5

El Vaticano durante cientos de años ha venido apartando de la vista de muchos cristianos, a Jesús. Esto lo ha venido haciendo metiéndo falsas ideas e interpretaciones de hombres, haciéndole creer a la humanidad que existen otros caminos para ir al cielo, como la adoración de María y otros santos. Si Dios ha dicho que NO debemos adorar nada que no sea Él, entonces eso es lo que debemos hacer. El único camino para ser salvos es Jesús:

“Jesús dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí.” Juan 14: 6

Debemos tener cuidado con lo que estamos haciendo con nuestras vidas. Recuerden que la Biblia es para todos nosotros, y Dios la dejó para que fuera de nuestro provecho y pudiéramos aprender como debíamos vivir nuestras vidas. Leámosla. No creamos lo que nos dicen los hombres. Creamos lo que nos está diciendo Dios a través de la Biblia, pues Su palabra es fuente de vida. Amén.